Ventajas del acero
El acero es un material versátil que puede utilizarse en distintas fases de la construcción. Resistente, duradero y 100% reciclable, simplifica enormemente la instalación y permite cumplir los requisitos más estrictos de resistencia térmica, acústica y antisísmica.
En la metalistería, el metal se suministra como elementos listos para usar, a menudo en combinación con otros materiales. Su modularidad y flexibilidad lo convierten en un elemento indispensable de la construcción moderna. El acero también se utiliza para fabricar herramientas, tanto manuales como motorizadas, y equipos de obra: encofrados, escaleras, andamios, etc.
El acero, múltiples usos en construcción y reformas
El acero es un material común pero poco conocido. No es un material natural, sino que se fabrica a partir de una combinación de materias primas naturales, principalmente hierro. Es fuerte, resistente, infinitamente reciclable y fácil de mantener.
Es fácilmente adaptable y puede utilizarse para fabricar una amplia gama de piezas, desde pequeñas y ligeras hasta grandes y pesadas.
El acero, un material polivalente y modulable
El acero es una aleación metálica que contiene principalmente hierro, pero también un máximo del 2% de carbono. Por lo tanto, no es un material natural, sino un material resultante de la transformación de materias primas de origen natural.
En función de la calidad del acero que se desee obtener y del uso previsto, se pueden añadir elementos químicos a la aleación, lo que permite producir un gran número de aceros diferentes.
¿Cuál es la familia del acero?
Existen tres grandes familias de aceros:
- Acero no aleado: Los aceros no aleados son los destinados al uso general, en la construcción y las obras públicas, la fabricación de herramientas y piezas soldables.
- Acero no inoxidable de baja aleación: Estas aleaciones de alta resistencia se caracterizan porque los elementos añadidos están en cantidades inferiores al 5% del total.
- Acero inoxidable de alta aleación: Estas aleaciones de alta resistencia están destinadas a usos específicos. Son muy resistentes al desgaste y la corrosión.
Las ventajas de este material
El acero es un material muy resistente y casi indestructible, lo que explica su uso en la fabricación de productos blindados. Puede utilizarse tanto para piezas ligeras y pequeñas como para piezas macizas, grandes y pesadas.
La principal ventaja de este material de fácil mantenimiento es que puede reciclarse indefinidamente.
El acero es un material con múltiples usos en reformas y construcciones
La fabricación del material
El acero, que no es natural, se fabrica en varias etapas principales:
- Preparación de las materias primas: el material procede de la industria de la fundición, es decir, de minerales de hierro, y/o de la industria de la chatarra, procedente del reciclado del acero. La materia prima se funde entre 1400 y 1500°C y se le añaden los elementos químicos adicionales.
- El proceso de solidificación: esta etapa consiste en la formación de productos semiacabados, bien por colada continua, antes de ser cortados según las necesidades, bien por colada en lingotes, en forma de productos moldeados.
- La transformación en productos acabados: la transformación de los productos semiacabados en productos acabados se realiza mediante laminado, fundición o forja. Así se puede fabricar cualquier tipo de producto.
¿Cómo se utiliza el acero?
El acero es un material ligero, fuerte y resistente que puede utilizarse para fabricar una gran variedad de piezas en muy diversos campos y aplicaciones (véase IPN del acero). Puede utilizarse para fabricar productos planos, productos largos y productos tubulares, entre otros.
Los ámbitos de uso más comunes son la construcción de edificios y puentes, el diseño de máquinas y herramientas, la automoción, la cerrajería y las industrias afines, la sanidad, la alimentación, el envasado y el blindaje.
El acero es un material muy común y se utiliza cada vez más en reformas y construcciones por su ligereza y gran resistencia.
Acero estructural, desde los cimientos hasta el techo
Las vigas y otros perfiles de acero galvanizado son los elementos estructurales de una construcción metálica.
En los edificios tradicionales, el refuerzo es necesario para reforzar los elementos estructurales de hormigón armado o de pequeñas unidades de mampostería (ladrillo, bloques de cemento, hormigón, etc.). Sin esto, la construcción no podría soportar durante mucho tiempo las tensiones físicas a las que está sometida. Prefabricados o realizadas in situ, estos refuerzos (también llamados armaduras) son como un esqueleto, unen las distintas partes de la estructura portante y cumplen requisitos precisos en cuanto a aspecto, dimensiones, calidades del acero, resistencia sísmica, etc.
Así, los cimientos superficiales de las casas se consolidan mediante zapatas (continuas) o aisladas, en función de sus características. Las losas y losas de hormigón se refuerzan con malla soldada, los muros de carga y el perímetro de los huecos con tirantes horizontales, verticales o inclinados. Entre otras aplicaciones estructurales, el acero proporciona el componente básico de los suelos secos con chapas nervadas o los suelos colaborativos (con paneles y losa de hormigón).
Acero siempre, en segunda obra
El acero, un material muy creativo, permite fabricar todo tipo de carpintería en todos los estilos posibles. Desde ventanas, puertas, escaleras, barandillas, etc. se benefician de una longevidad excepcional gracias a procesos de acabado resistentes a la corrosión: galvanización, acero inoxidable, recubrimiento en polvo, etc. El acero se utiliza cada vez más para cubiertas y revestimientos. Del mismo modo, es el material de entramado más común para tabiques y revestimientos aislantes, tanto en renovación como en obra nueva.
A tener en cuenta
El acero ofrece una gran libertad arquitectónica. Su resistencia mecánica permite diseñar armazones ligeros y económicos con grandes luces y amplias superficies acristaladas que permiten el máximo de luz natural y la libre captación de calor solar.